viernes, 26 de julio de 2024

  





1944 fue el ultimo año de producción pictórica de Emilio Rosenblueth, apenas unos meses antes de su fallecimiento su temática y estilo marcan una línea paralela dentro de lo considerado como Escuela mexicana , donde le paisaje  es una constante donde la tonalidad marca la profundidad con un juego de luces de gamas y ambientes de diversidad. Sin duda la dualidad que se fue formando entre Luz Fabila y él la podemos leer en ambos estilos , paradójicamente  en algunos temas de esta época Luz  servirá de modelo en una serie de obras  y que mejor que este tema de anunciación donde el angel es mas bien un hijo deseado o imaginado como angel de anunciación .


 

Es la época de Ávila Camacho y Marte R Gómez , cuando con la idea de en verdad se va a impulsar la pintura de paisaje con el motivo del salón de la Flor , donde como podemos ver estuvo presenta la obra de Luz Fabila  junto con la de Frida Kahlo , Diego Rivera, Chávez Morado , Olga Acosta , Maria Izquierdo, Federico Cantú, Manuel Echauri tanto en la exposición de 1942- 1943-1944 y 1945  con excepción de la ultima muestra de 45 en todas estas exposciones Rosenblueth y Fabila estuvieron presentes 

Caso extraño es la presencia de Angel Zárraga , que parecería que desde su regreso de Francia trataría de encontrarse los mas lejano a todos a pesar de su estilo inconfundible pretendería ser invisible.







Respecto a Luz y Federico Cantú, parecería que solo coincidirán en esta serie de exposiciones pues despues de varios episodios bastante negativos entre ambos no se frecuentarían en lo mas mínimo. 

 

Bo

 

ACE Art Consultant & Specialist

 

miércoles, 24 de julio de 2024

 

Carlos Merida

Anales de 1919 el pintor guatemalteco Carlos Mérida viajó a México, país que adoptaría como su segunda patria. Al poco tiempo de su llegada se publicó una pequeña nota en El Universal que daba cuenta de que el artista de “más rigurosa personalidad de aquellos países centroamericanos” había expuesto su producción plástica dos veces en París y una en Nueva York, y anunciaba una próxima en la capital mexicana donde, como se informaba, “nos dará a conocer sus obras, casi todas inspiradas sobre motivos indígenas”. Aun cuando para abril de ese año An- tonio Castro Leal dedicó un artículo en el que resaltaba la americanalabor de su obra, paradójicamente la presencia de Mérida ante el público capitalino se dio meses antes de la esperada muestra a través de sus colaboraciones periódicas enEl Universal Ilustrado, no como artista grá co sino como crítico de arte. Publicar en uno de los semanarios culturales más importantes de la época le brindó la oportunidad de transmitir sus ideas, que en aquel momento giraban en torno a una propuesta original: “el arte americano”, y así in uir con su visión en el medio cultural y artístico de México. El pintor continuó escribiendo hasta formar una vasta obra, elaborada durante más de seis décadas, que reúne casi doscientos documentos sobre crítica, estética, investigación y análisis del arte.




 

 

 

La Colección Cantú Y de Teresa , presenta anualmente una serie de exposiciones de arte en diferentes recintos y museos 

 

En esta ocasión y para conmemorar e; 75 aniversario de la fundación del Salón de la Plástica Mexicana , la figura de Carlos Mérida esta presente

 

Aquí la presentamos en el caballete del atelier CYDT acompañada del Tórculo del Siglo XIX donde se imprimiera una gran parte de la obra grafica del siglo XX

 

 

Adolfo Cantú



l contacto con las vanguardias artísticas lo hizo ver con otros ojos la cultura de su país natal, experiencia que lo orientó a una justa necesidad de reivindicar y adueñarse de los colores, formas, ritmos y contenidos de un mundo americano en el cual lo precolombino se mezclaba con la cotidianeidad indígena y el paisaje nativo, semiselvático y milenario de su tierra. Con Carlos Mérida se da el caso extraño, como comenta Luis Cardoza y Aragón, “del americano que regresa americano a América después de la larga permanencia en Europa”.Años más tarde, en un escrito autobiográ co, el artista recuerda que tuvo la sensación de haber descubierto América, un mundo nuevo poblado de visiones tales que eclipsaban por completo la suma de impresiones recibidas en Europa.

La tradición —mexicana y/o americana— la entiende como herencia del mun- do precolombino, como el espíritu de esa sociedad que pareciese haber quedado congelado en el tiempo, tradición milenaria que subsistió a la evolución occidental: “México es un país en que las épocas no se presentan en sucesión vertical sino en coexistencia horizontal, como láminas de un abanico desplegado”.



Colección de Arte Cantú Y de Teresa 

  MUNAL 2024


Muy estimado Mtro. Adolfo Cantú:

Con el gusto de saludarlo, me es grato comunicarme con usted con motivo de nuestra próxima muestra: Ángeles y Arcángeles. Las huestes celestiales en la Tierra, que tendrá lugar en las salas temporales de este recinto, del 9 de mayo al 29 de septiembre de 2024.

Esta exposición plantea un recorrido por más de cuatro siglos a través de la iconografía angélica. El Renacimiento, el Barroco, el Neoclasicismo, los Románticos y la Modernidad, las Vanguardias históricas y el arte contemporáneo tomaron a los ángeles como motivo estético, inspiración religiosa o figura de combate, desde los pinceles novohispanos de Baltasar de Echave Orio, Cristóbal de Villalpando, Juan Correa y Miguel Cabrera, Federico Cantú hasta los proyectos escultóricos de Jesús Contreras, Gabriel Guerra y Miguel Noreña.








En la tradición de las religiones monoteístas, la figura del arcángel y del ángel, octava y novena categorías dentro de las jerarquías angélicas, ocupan un lugar primordial en los vínculos entre Dios y los hombres. Mensajeros, portavoces, intermediarios y defensores de las leyes divinas. Asimismo, derivado de la herencia del cristianismo medieval, las presencias angélicas han formado parte -como protectores, patrones, devociones y advocaciones- de innumerables representaciones artísticas en Europa y el Nuevo Mundo.






jueves, 18 de julio de 2024

  San Juan



 

San Juan el bautista 

Federico Cantú 1907-1989

 

La presencia del bautista  dentro de la obra de Federico se convierte en constante , quizá  como punto de partida en torno a la composición podemos pensar en la tinta de 1936 perteneciente a la colección Cantú y de Teresa  , sin embrago como  tema vemos la presencia de San Juan en la composición de Madona 1928 de Los Ángeles California , hoy en dia presentada en MUNAL en 2024, despues de la solicitud de la colección CYDT para finalizar su estancia en el MUNE por mas de seis años

 

conocido como profeta Yahyaen el Corán),​ o simplemente el Bautista o San Juan, fue un predicadorambulante judío12​ coetáneo de Jesús de Nazaret, nacido a finales del siglo I a. C.

 Es venerado como un importante personaje religioso​ en el cristianismo, el islam, el drusismo​ y la fe bahá'í.

 Está considerado un profeta por todas estas confesiones y varias ramas del cristianismo lo han proclamado santo. Es considerado un personaje muy importante en el mandeísmo, pero no su fundador.

Juan usaba el bautismo como sacramento central de su movimiento mesiánico.17​ Su ejecución fue recogida por el historiador judío Flavio Josefo.18​ La mayoría de los académicos está de acuerdo en que Juan bautizó a Jesús.19​20​ Algunos estudiosos creen que Jesús fue discípulo de Juan

y que basó una parte de su predicación en las enseñanzas de Juan.

 

Varios evangelios cristianos cuentan que algunos de los primeros seguidores de Jesús habían sido antes discípulos de Juan.​ Algunos expertos mantienen que Juan estaba influenciado​ por los esenios, una secta judía con algunas características ascéticas que esperaba un apocalipsis y practicaba rituales muy relacionados con el bautismo, aunque no hay evidencias que apoyen esta hipótesis.

 

 

En la actualidad, algunos entre los judíos piensan que la destrucción del ejército de Herodes vino de Dios y que fue muy justa, pues castigó lo que hizo contra Juan, llamado «el Bautista». Porque Herodes asesinó a quien era un hombre bueno y comandaba la ira de los judíos. Hubo justicia para ambos y piedad hacia Dios, y se iba al bautismo para que el lavado [con agua] fuese aceptado por él, usando esto no para quitar algunos pecados, sino para purificar el cuerpo si el alma se había purificado antes con la justicia. Y ahora, cuando otros llegaban en tropel en torno a él porque se complacían gratamente al oír sus palabras, Herodes, asustado por el gran ascendiente que tenía sobre el pueblo para poder ponerlo de su lado e incitar una rebelión (porque ellos emprenderían cualquier cosa que les aconsejase) pensó que lo mejor era llevarlo a la muerte a fin de evitar cualquier daño que pudiera causar y le acarreara dificultades, y así librarse de un hombre que podía propiciarlas haciendo que se arrepintiera cuando fuera demasiado tarde. Por tanto, fue enviado prisionero lejos del suspicaz Herodes, a Maqueronte, el castillo antes mencionado, y allí fue condenado a muerte. Ahora, los judíos opinan que este ejército fue enviado como castigo a Herodes y mostraba el desagrado que Dios sentía hacia él.

 


Bo

CYDT